Necesidad de homogeneizar los protocolos de manejo clínico de las exposiciones al VIH en Europa

Esta necesidad es ya antigua. Dos grupos de trabajo que reúnen investigadores de un total de 14 países han realizado importantes estudios sobre el tema. Sus conclusiones y recomendaciones se recogen en sendos artículos de Jesus Almeda et al y Vincenzo Puro et al [1,2]. Dos series de recomendaciones específicas, según las circunstancias de la exposición, han sido hechas, si bien la diferencia entre ambas puede ser discutible en lo relativo a evitar o prevenir una infección confirmada después de una exposición al VIH (o, por supuesto, al VHC o VHB). Como señalan los autores, la profilaxis postexposicion (PEP) se aplica de forma sistemática a los profesionales sanitarios en casi todos los países, incluido EE UU, pero no en caso de exposiciones sexuales, o por uso inyectado de drogas por vía parenteral, o por otras exposiciones no ocupacionales al VIH. En el caso de una exposición profesional al VIH, la tarea de los investigadores ha sido homogeneizar las distintas recomendaciones y estrategias nacionales. Para las exposiciones no profesionales, el propósito fue establecer unas recomendaciones europeas, dado que existen pocas recomendaciones nacionales. Ambos artículos muestran que la justificación, las circunstancias, el manejo y la elección del tratamiento en una PEP son muy similares en ambas situaciones.